A continuación podrás consultar la guía rápida para evitar el reventón de Enero:
1. Evita todas las que puedas. Recuerda otros años, 7 u 8 comidas-cenas con mil y un grupos diferentes. Ya no es solo la familia y la comida de empresa, además proliferan comidas de navidad de multitud de clases particulares, gimnasio, amas de casa, asociaciones, vecinos, etc... Comidas de Navidad las justas.
2. No tienes que ser ni el que más coma, tampoco el que más beba, mucho menos el último en irse, el cierra bares. En estas comidas no se estima la cantidad, kilos y kilos de comida de todo tipo, el objetivo no es comer si no celebrar a través de un banquete, ideados cuando la gente pasaba hambre todo el año, muy lejos de nuestra obesa sociedad. O es que alguna vez ha pensado de verdad que podría comerselo todo.
3. Sáltate la morralla. Varios entrantes low-cost pueden servir para camuflar lo único que se salve de la cena. Búsquelo o pregunte al encargado o anfitrión.
4. Un consejo dietético básico: evite o minimice el consumo de alcohol y de azúcar. Esto pasa por escoger fruta de temporada de postre, y evitar en lo posible los polvorones, mantecados y turrones.
5. Vuelve a casa andando. La mejor comida de Navidad es la que acaba con un largo paseo tomando el fresco camino a casa. La senda que le lleva de los chupitos a las copas de media tarde es tenebrosa y peligrosa para su salud.
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